martes, 24 de junio de 2008
Correcciones de texto
viernes, 6 de junio de 2008
Exposición de bonsai
Desde el pasado viernes y hasta el próximo 14 de junio, podrá ser apreciada en las instalaciones del Complejo Cultural de Maturín, la II Exposición de Bonsái la cual es promovida por el Instituto de Cultura que tiene como parte de sus objetivos, abrir verdaderos espacios a la diversidad cultural y satisfacer las necesidades de expresión y creatividad de los cultores de la entidad monaguense.
Diminutos especimenes que tienen hasta 33 años de edad como, un totumo o uno de níspero de 31 años, se encuentran dentro de esta colección de 32 pequeñas plantas, que podrán ser vistas por el público en los diferentes niveles del Complejo Cultural de la ciudad de Maturín.
jueves, 5 de junio de 2008
Notas sobre el arte de la poesía - Dylan Thomas
Aquellas palabras fueron para mí como podrían ser para quien, sordo de nacimiento, recuperase milagrosamente el sentido auditivo; el sonar de las campanas, el lenguaje de los instrumentos, el rumor del viento, de la lluvia, el tintineo de los tarros del carro del lechero, los suspiros de los ramos en las macetas de las ventanas. No me importaba su significado; ni siquiera aquellas que pudieran salvar a Jack y Hill o a Mama Oca. Me golpeaba la forma del sonido que aquellos nombres y las palabras que describían sus acciones producían en mis orejas: el color que las palabras creaban ante mis ojos. Acepto que, al volver atrás con el pensamiento rememoro románticamente mi reacción frente a la simple belleza de loe “términos” de aquellas ingenuas poesías. Me enamoré a primera vista. Y estoy todavía a merced de las palabras.
Cuando comencé a leer poesía infantil yo solo y, más adelante, todo tipo de versos, comprendí que había descubierto la cosa más importante del mundo para mí. Estaban ahí, aparentemente muertas, hechas sólo de negro y blanco; pero fuera de eso, fuera de su ser, mutaban en amores y temores; y piedad y dolor y maravilla y todas las otras sensaciones que hacen peligrosa, grande y soportable nuestra efímera vida.
Y aunque el significado de las palabras fuese divertido, mucho más divertidas me parecían entonces las formas, las dimensiones; el rumor de las palabras. Cómo se juntaban, rozaban, intercambiaban y co-engranaban. Era el tiempo de la inocencia. Las palabras eran como la primavera, frescas como un rugido en el paraíso, como si volasen en el viento. Hacían sus asociaciones autónomamente mientras explotaban y brillaban. Me golpearon profundamente los versos de John Donne; “Ve a buscar una estrella candente, una raíz de mandrágora”, a pesar de que no alcancé a entenderlo la primera vez que lo leí. A medida que adentraba en la lectura –y no sólo de poesías- mi amor por la vida real de las palabras fue aumentando ya que comprendí que debía vivir con ellas y en ellas para siempre.
No me gusta escribir sobre las palabras: sólo encuentro las peores. Me gusta usar las palabras como el artesano la madera o la piedra: tallarlas; modelarlas, pulirlas hasta lograr el modelo capaz de imprimir impulsos líricos, dudas o convicciones, verdades vagamente percibidas que debo tratar de entender y realizar.
Los escritores que influyeron mi primera poesía y mis cuentos fueron, simple y sinceramente, todos. Todos los que leía en ese tiempo. Y, como pueden ver, van de los escritores de aventuras para niños hasta maestros incomparables e inimitables como Blake. Esto quiere decir que uno se influye tanto de los buenos como de los malos escritores Yo traté de eliminar las malas influencias, poco a poco, eco a eco, a través de tentativas y errores, alegrías, tristezas y dudas, de tanto amar las palabras y odiar aquellas pesadas manos que las humillaban.
Lo primero que me hizo amar el lenguaje y me decidió a trabajar en eso y para eso fue esa gran mezcla de poesía infantil, cuentos de hadas, baladas escocesas, la Biblia, los cantos de la inocencia de Blake y de su incomprensible absurdidad mágica; oído, leído y casi asesinado en la escuela.
Ningún escritor honesto, puede hoy negar la influencia del trabajo pionero de Freíd en el campo del inconsciente y sus aportes a la labor científica, filosófica y artística de sus contemporáneos, aunque no necesariamente a través de su obra.
En cuanto al uso deliberado de las rimas, ritmos y palabras nuevas contesto que si. Soy un consciente y serio creador de palabras, aun cuando el resultado pueda ser vano y yo use de modo equivocado mis dotes técnicas. Me sirvo de cualquier cosa para que mi poesía crezca y se mueva en la dirección que yo deseo: viejos trucos, nuevos trucos, juegos de palabras, calembours, paradojas, alusiones, asonanzas, vocalismos, ritmos rotos. Cualquier esquema lingüístico existe porque se ha usado. El poeta debe divertirse alguna vez y el movimiento y retorcimiento de las palabras, las invenciones y los juegos, forman todos parte de la alegría que también pertenece a este trabajo doloroso y esforzado.
Quieren saber si mi combinación de palabras en la búsqueda de algo nuevo, “a la manera surrealista”, se basa en una fórmula determinada o espontánea. Creo que hay una confusión; porque la fórmula preestablecida del surrealismo era la yuxtaposición de lo de lo impremeditado. A ver si lo aclaro. Los surrealistas querían adentrarse en el subconsciente, en aquello que existe bajo la capa del consciente, y apresar sus imágenes sin la ayuda de la lógica, de la razón, trasladándola, sin lógica ni razón, a la pintura o literatura.
Afirmaban que, estando sumergidas las tres cuartas partes del espíritu, era deber del artista buscar material en la inmensa masa sumergida que, como la punta de un iceberg, emerge del mar del subconsciente. Los surrealistas gustaban relacionar en la poesía palabras e imágenes que no tuvieran conexiones racionales y esperaban lograr así un tipo de poesía del sueño que estuviera más cerca del mundo de la imaginación que la poesía concreta en que se apoya en los objetos, ideas, imágenes. Reducido, éste era el credo surrealista, con el cual estoy en profundo desacuerdo. No me interesa de donde pudieran venir las imágenes de la poesía; que las saquen, si quieren, del vasto mar del misterio, pero, antes de llegar al papel deberán pasar todos los procesos racionales del intelecto. Por otra parte, los surrealistas metían ahí las palabras tal cual emergían del caos; no las modelaban ni las ordenaban porque para ellos el mismo caos es forma y orden. Ellos pensaban que cada cosa salida de sus subconscientes y transformada en pintura o palabras debía ser absolutamente válida e interesante. Uno de los predicamentos del poeta consiste en hacer comprensible y claro todo lo que rastrea en su interior. El intelectual debe seleccionar en la masa amorfa de las imágenes del subconsciente aquello que mejor favorece su soplo imaginativo.
¿Cuál es mi definición de la poesía? Yo no leo más que por puro placer personal. Y si la encuentro todo lo que puedo decir es : ¡Eso!, y la leo porque me gusta. Lean, entonces, la poesía porque les gusta. Sin preocuparse si es importante o si durará. Después de todo ¿qué importa saber qué es la poesía? Si quieren una definición, aquí va: “La poesía es aquello que me hace reír, o llorar, o arrepentirme, que hace relucir la uñas de mis pies, que me hace esto, o aquello, o nada”, y así es.
La verdadera importancia de la poesía reside en el placer que procura, aun cuando es trágica. Lo que cuenta es el eterno movimiento que existe dentro de ella; la vasta corriente subterránea de dolor, ternura, exaltación, o ignorancia humana que se encuentra hasta en poemas no profundos.
Yo puedo examinar una poesía y ver qué cosa la hace vivir técnicamente. Pero nada tiene eso que ver con el misterio que ha llegado a conmoverme. El mayor creador deja siempre huecos en su trabajo poético, de modo que aquello que no se encuentra en la poesía pueda resplandecer en uno.
El placer y la función de la poesía están hoy, como en el pasado, en la celebración del hombre que es la única celebración de Dios.
miércoles, 4 de junio de 2008
El Perfume, Patrick Süskind y otros comentarios
Rogelio León contó la trama de la obra de Patrick Süskind, que resultó bien apasionante, tal como fue la misma película que se realizó basada en esa obra.
Uno de los hechos reflejados en El Perfume como en la gran mayoría de la literatura universal es el caracter machista con que los libros han sido elaborados, bajo el criterio de León.
Se conversó sobre las diferencias entre la literatura latina, eslava y anglo. Entre otras obras comentadas se encuentran El Matadero de Esteban Echeverría, Martín Fierro de José Hernández, Raíces que constituyó una obra "que cambió historia". También fue discutida la trama de Intermitencias de la muerte de José Saramago.
Al final del taller se conversó sobre el movimiento literario colombiano llamado el Nadaismo.
Taller infantil, Relectura, Cambalache
También se conversó sobre los Talleres de Lectura que tiene el Instituto de Cultura del Estado Monagas.
El fin de semana pasado, personalmente tuve oportunidad de participar en el Cambalache de libros que organizó Relectura en el Centro Cultural Chacao. Lo comenté por lo bien interesante que fue el mismo. Me fuí con una bolsa de 14 libros que tenía hace años en casa y regresé con otros 14... ahora los comienzo a leer. ¡Qué buena iniciativa de Relectura! Les comento la idea a la gente del ICUM en Maturín por si se animan en algún momento a algo similar.
Les tomo esta foto a la gente de Relectura sobre el Cambalache (disculpen si tienen derechos de autor):
jueves, 29 de mayo de 2008
Recuento del pasado 22 de mayo de 2008
Uno de los facilitadores del taller nuevamente planteó que los escritos que realizáramos no serían confrontados todavía, esperando realizar confrontaciones directas en un futuro e igualmente mostró la necesidad de equilibrar los ejercicios entre poesía y narrativa.
Hubo una nueva discusión sobre las razones para escribir, señalando el acto de escribir como un ejercicio para "memoriar", metáfora de la memoria ante el terror que puede producir el hecho futuro de no existir. Este pensamiento puede igualmente extenderse a otras ramas del arte, como la música, la pintura, la escultura, donde cada uno de sus productos constituyen parte de la memoria colectiva de la humanidad.
También se conversó sobre una especie de movimiento de los iluminados que se presentó entre los años 20 y 50 del siglo pasado, relacionada incluso con la escuela socio - pedagógica del gestalt. En ese contexto se circunscribe Rómulo Gallegos, quien junto con otros escritores concibió la existencia radical del bien y el mal, sin necesariamente aceptarse la presencia de términos graduales entre ambas posiciones absolutas.
Una de las características de Gallegos es que no se convirtió en un escritor de "naturaleza universal", de acuerdo con Rogelio León, sino que se quedó en el ámbito local... tan local que ninguna de sus obras podría trasladarse a otras latitudes por presentar elementos específicos del ambiente regional para donde escribió, como el llano venezolano, la zona de Guayana, la selva venezolana y otras.
Dentro de Doña Bárbara de Rómulo Gallegos se habló de Mister Danger, tomado por Gallegos como símbolo del mal, bajo la figura idealizada de la corrupción, de la prostitución y quizás de cierto recelo para con el "gringo".
Contrariamente a ese estilo de Gallegos se encuentra Juan Rulfo, donde con su novela Pedro Páramo, se refleja el hombre en el contexto del mundo.
¿Cómo debemos producir el acto de escribir, para hacer una novela universal o como una búsqueda del acto creativo basado en un hecho espontáneo? Buena parte de la discusión versó sobre este tema.
Discutimos también sobre la trascendencia universal de William Shakespeare, incluyendo las diversas dudas sobre la verosimilitud de Shakespeare como creador real de sus obras, claro, sin tomar posición sobre la certeza o la incertidumbre del mismo.
Dentro del criterio de universalidad de ciertas obras, se comentó que nuestro Perez Bonalde escribió el Canto al Niágara, el cual, aunque está relacionado con el Niágara, no constituye una obra precisamente de color local del Canadá, sino una misma obra de gran universalidad.
domingo, 18 de mayo de 2008
El acto de escribir
He aquí al poeta frente al papel. Es igual que tenga un plan o no, que haya meditado largamente sobre lo que va a escribir o que su conciencia esté tan vacía y en blanco como el papel inmaculado que alternativamente lo atrae y lo repele. El acto de escribir entraña, como primer movimiento, un desprenderse del mundo, algo así como arrojarse al vacío. Ya está solo el poeta. Todo lo que era hace un instante su mundo cotidiano y sus preocupaciones habituales, desaparece. Si el poeta de verdad quiere escribir y no cumplir una vaga ceremonia literaria, su acto lo lleva a separarse del mundo y a ponerlo todo —sin excluirse a él mismo— en entredicho. Pueden surgir entonces dos posibilidades: todo se evapora y desvanece, pierde peso, flota y acaba por disolverse; o bien, todo se cierra y se torna agresivamente objeto sin sentido, materia inasible e impenetrable a la luz de la significación. El mundo se abre: es un abismo, un inmenso bostezo; el mundo —la mesa, la pared, el vaso, los rostros recordados— se cierra y se convierte en un muro sin fisuras. En ambos casos, el poeta se queda solo, sin mundo en que apoyarse. Es la hora de crear de nuevo el mundo y volver a nombrar con palabras esa amenazante vaciedad exterior: mesa, árbol, labios, astros, nada. Pero las palabras también se han evaporado, también se han fugado. Nos rodea el silencio anterior a la palabra. O la otra cara del silencio: el murmullo insensato e intraducible, “the sound and the fury”, el parloteo, el ruido que no dice nada, que sólo dice: nada. Al quedarse sin mundo, el poeta se ha quedado sin palabras. Quizá, en este instante, retrocede y da marcha atrás: quiere recordar el lenguaje, sacar de su interior todo lo que aprendió, aquellas hermosas palabras con las que, un momento antes, se abría paso en el mundo y que eran como llaves que le abrían todas las puertas. Pero ya no hay atrás, ya no hay interior. El poeta lanzado hacia adelante, tenso y atento, está literalmente fuera de sí. Y como él mismo, las palabras están más allá, siempre más allá, deshechas apenas las roza. Lanzado fuera de sí, nunca podrá ser uno con las palabras, uno con el mundo, uno consigo mismo. Siempre es más allá. Las palabras no están en parte alguna, no son algo dado, que nos espera. Hay que crearlas, hay que inventarlas, como cada día nos creamos y creamos al mundo. ¿Cómo inventar las palabras? Nada sale de nada. Incluso si el poeta pudiese crear de la nada, ¿qué sentido tendría hablar de "inventar un lenguaje"? El lenguaje es, por naturaleza, diálogo. El lenguaje es social y siempre implica, por lo menos, dos: el que habla y el que oye. Así, la palabra que inventa el poeta --esa que, por un instante que es todos los instantes, se había evaporado o se había convertido en objeto impenetrable— es la de todos los días. El poeta no la saca de sí. Tampoco le viene del exterior. No hay exterior ni interior, como no hay un mundo frente a nosotros: desde que somos, somos en el mundo y el mundo es uno de los constituyentes de nuestro ser. Y otro tanto ocurre con las palabras: no están ni dentro ni fuera, sino que son nosotros mismos, forman parte de nuestro ser. Son nuestro propio ser. Y por ser parte de nosotros, son ajenas, son de los otros: son una de las formas de nuestra "otredad" constitutiva. Cuando el poeta se siente desprendido del mundo y todo, hasta el lenguaje mismo, se le fuga y deshace, él mismo se fuga y se aniquila. Y en el segundo momento, cuando decide hacerle frente al silencio o al caos ruidoso y ensordecedor, y tartamudea y trata de inventar un lenguaje, él mismo es quien se inventa y da el salto mortal y renace y es otro. Para ser él mismo debe ser otro. Y lo mismo sucede con su lenguaje: es suyo por ser de los otros. Para hacerlo de veras suyo, recurre a la imagen, al adjetivo, al ritmo, es decir, a todo aquello que lo hace distinto. Así, sus palabras son suyas y no lo son. El poeta no escucha una voz extraña, su voz y su palabra son las extrañas: son las palabras y las voces del mundo, a las que él da nuevo sentido. Y no sólo sus palabras y su voz son extrañas; él mismo, su ser entero, es algo sin cesar ajeno, algo que siempre está siendo otro. La palabra poética es revelación de nuestra condición original porque por ella el hombre efectivamente se nombra otro, y así él es, al mismo tiempo, éste y aquél, él mismo y el otro.
sábado, 17 de mayo de 2008
ICUM bautiza nuevo libro de Beltrán Trujillo Centeno
Reunión del 8 de mayo de 2008
La mesa de reunión estuvo conformada por:
- Rogelio León
- Ana Soto (anamanuela@hotmail.com)
- Teresa Rosas (rosat08@hotmail.com)
- Victoria Díaz (victoriass@gmail.com)
- Gustavo Cruz Chavez (runaamazonico@yahoo.com)
- Liry Berra (liryberra@gmail.com)
- Marla Berra (marlal@cantv.net)
- Alcides Rojas (aj_rojasgil70@yahoo.es)
- Zoila Emilia Subero (slavianka@hotmail.com)
- Obando Flores (obandoflores@gmail.com)
- Juan Manuel Arcia (juanmanuelarcia@homtmail.com)
- Denise
Rogelio expresó varias ideas antes de realizar las lecturas de los escritos, entre ellas el hecho que "...el escribir no debe ser un hecho fortuito...". Habló de Funes el Memorioso de Jorge Luis Borges, de que la escritura es una metáfora de la memorialidad, cual fotografía como la realidad. Sobre José Saramago conversó del libreo "La Intermitencia de la Muerte". También habló del concepto de intrahistoria, introducido por Unamuno. Comentó que la llamada literatura infantil o pretendida para niños no existe como tal básicamente porque nosotros como adultos no tenemos el lenguaje infantil, precisamente por no serlo. Habló de Esteban Echeverría, de Rafael Cadenas con sus Micropoemas y de Nicolás Guillén con Songorocozongo.
Para la próxima semana Alcides propuso que cada uno escribiera inducido por la imagen de una pintura específica de Botero... ya veremos qué pasa.
El siguiente jueves, 15 de mayo de 2008, el taller coincidió con el bautizo del libro de Beltrán Trujillo Centeno, por lo que el Taller de Poesía y Narrativa se incorporó a esta actividad.
Hasta una próxima oportunidad.
lunes, 5 de mayo de 2008
Nos llegó esta invitación
Nos llegó esta invitación para la presentación de nuevo libro de Beltrán Trujillo Centeno, escritor de Santa Bárbara de Maturín
jueves, 1 de mayo de 2008
Correo de Luis Segundo Renaud
En el siguiente link aparece: NOTAS DE SANDOR MARAI
http://cid-4b6e7a9cf00ac111.skydrive.live.com/self.aspx/P%c3%bablico/Notas%20de%20Sandor%20Marai.pdf
¿Qué hicimos el 24 de abril de 2008?
Rogelio planteó leer los escritos sin confrontar, sin profundizar, sin analizar contenidos ni nada que en este primer ejercicio pudiera afectar de alguna manera a gente que por primera vez agarraba un lápiz y en público se atreviera a manifestar. Particularmente procuré escuchar con suma atención y percibir con mis limitaciones las diferentes formas de expresar de los compañeros y les confieso que me sorprendí, pues no conseguí algo que me pareciera que desentonara en los relatos. Claro, esto es solo apreciación personal, veremos qué sucede más adelante.
Otra actividad pendiente de realizar fue el comentario de alguna obra literaria que hubiésemos leído en alguna oportunidad. Luego de varias indagaciones entre todos, se escogió conversar sobre la Odisea, mencionada como una "oralitura", obra colectiva, tal como fue El Cid.
Se habló de la presencia del héroe y del anti-héroe.
Rogelio León recomendó la obra Yo, El Supremo, de Augusto Roa Bastos, ambientada en el Paraguay del último cuarto del siglo XIX.
Tuve oportunidad de expresar la idea del presente blog a todos los compañeros asistentes, aunque a algunos les pareció interesante, a otros les pareció que no querían exponer sus escritos ante la web. Les mencioné que podía diseñar el blog de tal forma que solo el grupo pudiera leerla... pero no se, me quedó en la boca un sabor de algo así como que "...mejor no te metas por aqui..." jejeje, pero bueno, esto es solo un primer intento. Por los momentos iré colocando mis inquietudes sobre el no taller, que ¡bien interesante está!
viernes, 18 de abril de 2008
Comentarios sobre charla del 17 de abril de 2008
En una primera parte todos los participantes realizamos un ejercicio de narrativa partiendo de una expresión de arranque, estimándose que los mismos serían leídos en público la próxima semana y probablemente publicados en este blog. Ya veremos lo que pasa con esta primera gestión con lapiz y papel en mano.
En la segunda parte, el escritor Luis Segundo Renaud conversó sobre la escritora María Luisa Lázaro, cuya parte de su vida transcurrió en la ciudad de Maturín. Se acordó que próximamente leeríamos una de sus novelas para su discusión en público.
La tercera y última parte no menos interesante correspondió a una confrontación sobre la orientación del taller. Rogelio León indicó estar de acuerdo con el ejercicio discutido en la primera parte, sin embargo es pertinente planificar la lectura de obras específicas para que sean discutidas en el taller, bueno, en el no taller. Otros participantes, quienes ya habían estado en otros eventos relacionados resaltaron la necesidad de que el ejercicio realizado sea leído y discutido lo más pronto posible, indicando que esperar una semana puede ser mucho tiempo y enfatizó igualmente la necesidad de leer obras específicas que sean discutidas posteriormente. Mucho énfasis hubo en la necesidad de "leer para escribir", leer para crear y confrontar. Se acordó que para la próxima semana se traerán a la mesa discusiones específicas de obras para ser analizadas entre todos.
jueves, 17 de abril de 2008
Participantes del Taller de Poesía y Narrativa
- Coromoto Briceño (coromoto_briceño@yahoo.com)
- Alexis Torrealba (luchalex@yahoo.es)
- Teresa Rojas
- Alcides José Rojas (aj_rojasgil70@yahoo.es)
- Doelmis Salazar (nazareth.25@hotmail.com)
- Yhoana Marquez
- Gustavo Cruz Chavez (runaamazonio@yahoo.com)
- Karla Rivas (karl-ita-1987@hotmail.com)
- Roxana Romero (rxn_joseph_297@hotmail.com)
- William Torcatiz (torcatizw@gmail.com)
- Jeannette Fernandez (yanerita@hotmail.com)
- Obando Flores (obandoflores@gmail.com)
- Ivan Mendez (mendezjp@pdvsa.com)
- Victoria Diaz (victoriass@hotmail.com)
- Manuel Alfonso (manuelalfonzo_46@hotmail.com)
- Annas Zerpa (annazerpa@hotmail.com)
- Aura Hernandez
- Pedro Luis Salazar (porcentaje@hotmail.com)
- Nerica Ríos
- Freddy Orea Lanz (narrativa.ve@gmail.com)
- Zoila Emilia Zubero (slavianka@hotmail.com)
- Maricely Bolívar
- Rudy Ordaz
- Raquel Sanabria
- Joharis Gonzalez
- Rosaluis Salas
- Juan Manuel Arias (juanmanuelarcia@hotmail.com)
- Jesús Eddixon Gonzalez (eddixon78@yahoo.com)
- Aldrin Solano (aldrinasol@hotmail.com)
- Osman Moya (osmanmonagas@hotmail.com)
- Otto Gonzalez (amialmagrande@yahoo.es)
- Victor Rojas (cosmosraku@hotmail.com)
sábado, 12 de abril de 2008
Cosmópolis
"El Cuervo" de Edgar Allan Poe
Narrativa versus poesía
¿Para qué escribo?
Agenda de la segunda reunión
- ¿para qué escribo?
- narrativa versus poesía
- traductores traidores
- "El Cuervo" de Edgar Allan Poe y Juan Antonio Perez Bonalde
- París como anterior centro de creación del mundo versus el mundo global actual
- Horario segundo round
Al final de la reunión Victor Rojas nos entregó una hoja con algo escrito, "Cosmópolis" y pronto hablaremos de eso.
Primera reunión
- los miembros del panel del taller
- la presentación de los participantes
- el horario
- confrontar y compartir
Miembros del panel
Se presentaron uno a uno Miguel Mendoza, directivo del ICUM, Luis Segundo, facilitador, escritor, Victor Rojas, también del ICUM y el escritor Rogelio León. Disculpen que no los conozca bien, pero entiendan, primer día.
Presentación de los participantes
Uno a uno nos fuimos presentando quienes manifestamos interés en participar en el taller. No incluyo acá la lista completa porque la calidad del sonido del Salón Andrés Bello de la Biblioteca de Maturín, impide escuchar con claridad a cada uno de los participantes, pero somos como 18 personas. Cuando tenga la lista oficial, la colocaré en un archivo.
Horario
Con el horario tuvimos un primer round, amistoso claro. Lo llamo así porque esta nota la estoy escribiendo luego del segundo encuentro, donde discutimos el segundo round del horario. No importa. En principio estaremos los jueves de 6 de la tarde a 8 de la noche, por lo menos en este round.
Confrontar y compartir
En este primer encuentro se mostró algo del objetivo del taller y de los lineamientos generales del mismo, centrándose en la necesidad de confrontar ideas relacionadas con la narrativa y la poesía y compartir las mismas con la intención de profundizar, mejorar y aceptar críticas, sin ánimo alguno de "destrozar" lo que alguien escribe. Asusta algo. Veremos qué pasa.
Para la próxima semana... lápiz, papel y ganas de trabajar.
Parto del taller que todavía no se qué es
Pero bueno, aquí estamos, asistiendo al inicio. Vamos a ver qué pasa.