martes, 24 de junio de 2008

Universo infinito de la pasión

Nos llegó esta invitación en la ciudad de Maturín. La publico algo tarde, pero aún está vigente.

Correcciones de texto

Los días 5 y 12 de junio se comenzó a hablar de correcciones de los textos por nosotros escritos. Hablamos de la reiteración que en muchas casos y erróneamente utilizamos como elemento de nuestros escritos. Debe evitarse sobremanera. Ahora, es útil en caso de requerir ser enfático en la expresión. Fue comentado el papel del adjetivo, el cual, si no es bien cuidado, puede matar el contenido. Debe evitarse la cacofonía y sobre estes aspecto comentamos que en inglés no tiene la misma connotación, hecho que dio pasa a que Rogelio León expusiera la riqueza del español como instrumento de creación, a diferencia del inglés donde se habla más de la "rudeza" del mismo y las múltiples acepciones de las palabras.
Durante la charla se habló de Augusto Monterroso, el rey de los cuentos breves.
Para la siguiente semana, el 19 de junio debíamos llevar textos en verso para ser analizados. Lamenté no poder asistir al mismo. Ya les comentaré lo que hicimos en cuanto converse con los compañeros.
Saludos...

viernes, 6 de junio de 2008

Tarjeta de bautizo del libro de Jesús Gonzalez

Nos llegó esta invitación de Luis Segundo Renaud:


Exposición de bonsai

Alguien dirá que este es un blog de poesía y narrativa del ICUM, mas cómo hacer si al llegar a la sede de la Biblioteca del Complejo Cultural nos encontramos con una exposición de Bonsai. Hago a un lado la discusión literaria y les muestro algo de la II Exposición de Bonsai promovida por el Instituto de Cultura del Estado Monagas.

Acá les transcribo la nota aparecida en la página oficial del ICUM sobre esta exposición:

Exposición de bonsái en instalaciones del Complejo

Desde el pasado viernes y hasta el próximo 14 de junio, podrá ser apreciada en las instalaciones del Complejo Cultural de Maturín, la II Exposición de Bonsái la cual es promovida por el Instituto de Cultura que tiene como parte de sus objetivos, abrir verdaderos espacios a la diversidad cultural y satisfacer las necesidades de expresión y creatividad de los cultores de la entidad monaguense.

La muestra que se exhibe al público, pertenece al profesor Julio César González Figueroa un creador y diseñador de bonsái quien desde los 20 años de edad se ha dedicado con paciencia, creatividad y conocimientos al hecho ecológico y al cuidado de estos pequeños árboles que son expuestos por segundo año consecutivo.

Diminutos especimenes que tienen hasta 33 años de edad como, un totumo o uno de níspero de 31 años, se encuentran dentro de esta colección de 32 pequeñas plantas, que podrán ser vistas por el público en los diferentes niveles del Complejo Cultural de la ciudad de Maturín.


jueves, 5 de junio de 2008

Notas sobre el arte de la poesía - Dylan Thomas



Les copio a continuación Notas sobre el arte de la poesía de Dylan Thomas, aportado para este blog por Luis Segundo Renaud:

Les confiese que en un principio quise escribir poesía porque me había enamorado de las palabras. La poesía para niños fue la primera que conocí y aún antes de ser capaz de leer solo una línea me enamoré de las palabras, de las palabras en sí mismas. Lo que representan, su simbología o significado real, era secundario para mí. Lo que contaba era la música, el sonido con que las había recibido de los labios de los remotos e incomprensibles adultos que, por alguna razón, aparecían en mi mundo.

Aquellas palabras fueron para mí como podrían ser para quien, sordo de nacimiento, recuperase milagrosamente el sentido auditivo; el sonar de las campanas, el lenguaje de los instrumentos, el rumor del viento, de la lluvia, el tintineo de los tarros del carro del lechero, los suspiros de los ramos en las macetas de las ventanas. No me importaba su significado; ni siquiera aquellas que pudieran salvar a Jack y Hill o a Mama Oca. Me golpeaba la forma del sonido que aquellos nombres y las palabras que describían sus acciones producían en mis orejas: el color que las palabras creaban ante mis ojos. Acepto que, al volver atrás con el pensamiento rememoro románticamente mi reacción frente a la simple belleza de loe “términos” de aquellas ingenuas poesías. Me enamoré a primera vista. Y estoy todavía a merced de las palabras.

Cuando comencé a leer poesía infantil yo solo y, más adelante, todo tipo de versos, comprendí que había descubierto la cosa más importante del mundo para mí. Estaban ahí, aparentemente muertas, hechas sólo de negro y blanco; pero fuera de eso, fuera de su ser, mutaban en amores y temores; y piedad y dolor y maravilla y todas las otras sensaciones que hacen peligrosa, grande y soportable nuestra efímera vida.

Y aunque el significado de las palabras fuese divertido, mucho más divertidas me parecían entonces las formas, las dimensiones; el rumor de las palabras. Cómo se juntaban, rozaban, intercambiaban y co-engranaban. Era el tiempo de la inocencia. Las palabras eran como la primavera, frescas como un rugido en el paraíso, como si volasen en el viento. Hacían sus asociaciones autónomamente mientras explotaban y brillaban. Me golpearon profundamente los versos de John Donne; “Ve a buscar una estrella candente, una raíz de mandrágora”, a pesar de que no alcancé a entenderlo la primera vez que lo leí. A medida que adentraba en la lectura –y no sólo de poesías- mi amor por la vida real de las palabras fue aumentando ya que comprendí que debía vivir con ellas y en ellas para siempre.
No me gusta escribir sobre las palabras: sólo encuentro las peores. Me gusta usar las palabras como el artesano la madera o la piedra: tallarlas; modelarlas, pulirlas hasta lograr el modelo capaz de imprimir impulsos líricos, dudas o convicciones, verdades vagamente percibidas que debo tratar de entender y realizar.

Los escritores que influyeron mi primera poesía y mis cuentos fueron, simple y sinceramente, todos. Todos los que leía en ese tiempo. Y, como pueden ver, van de los escritores de aventuras para niños hasta maestros incomparables e inimitables como Blake. Esto quiere decir que uno se influye tanto de los buenos como de los malos escritores Yo traté de eliminar las malas influencias, poco a poco, eco a eco, a través de tentativas y errores, alegrías, tristezas y dudas, de tanto amar las palabras y odiar aquellas pesadas manos que las humillaban.

Lo primero que me hizo amar el lenguaje y me decidió a trabajar en eso y para eso fue esa gran mezcla de poesía infantil, cuentos de hadas, baladas escocesas, la Biblia, los cantos de la inocencia de Blake y de su incomprensible absurdidad mágica; oído, leído y casi asesinado en la escuela.

Ningún escritor honesto, puede hoy negar la influencia del trabajo pionero de Freíd en el campo del inconsciente y sus aportes a la labor científica, filosófica y artística de sus contemporáneos, aunque no necesariamente a través de su obra.

En cuanto al uso deliberado de las rimas, ritmos y palabras nuevas contesto que si. Soy un consciente y serio creador de palabras, aun cuando el resultado pueda ser vano y yo use de modo equivocado mis dotes técnicas. Me sirvo de cualquier cosa para que mi poesía crezca y se mueva en la dirección que yo deseo: viejos trucos, nuevos trucos, juegos de palabras, calembours, paradojas, alusiones, asonanzas, vocalismos, ritmos rotos. Cualquier esquema lingüístico existe porque se ha usado. El poeta debe divertirse alguna vez y el movimiento y retorcimiento de las palabras, las invenciones y los juegos, forman todos parte de la alegría que también pertenece a este trabajo doloroso y esforzado.

Quieren saber si mi combinación de palabras en la búsqueda de algo nuevo, “a la manera surrealista”, se basa en una fórmula determinada o espontánea. Creo que hay una confusión; porque la fórmula preestablecida del surrealismo era la yuxtaposición de lo de lo impremeditado. A ver si lo aclaro. Los surrealistas querían adentrarse en el subconsciente, en aquello que existe bajo la capa del consciente, y apresar sus imágenes sin la ayuda de la lógica, de la razón, trasladándola, sin lógica ni razón, a la pintura o literatura.

Afirmaban que, estando sumergidas las tres cuartas partes del espíritu, era deber del artista buscar material en la inmensa masa sumergida que, como la punta de un iceberg, emerge del mar del subconsciente. Los surrealistas gustaban relacionar en la poesía palabras e imágenes que no tuvieran conexiones racionales y esperaban lograr así un tipo de poesía del sueño que estuviera más cerca del mundo de la imaginación que la poesía concreta en que se apoya en los objetos, ideas, imágenes. Reducido, éste era el credo surrealista, con el cual estoy en profundo desacuerdo. No me interesa de donde pudieran venir las imágenes de la poesía; que las saquen, si quieren, del vasto mar del misterio, pero, antes de llegar al papel deberán pasar todos los procesos racionales del intelecto. Por otra parte, los surrealistas metían ahí las palabras tal cual emergían del caos; no las modelaban ni las ordenaban porque para ellos el mismo caos es forma y orden. Ellos pensaban que cada cosa salida de sus subconscientes y transformada en pintura o palabras debía ser absolutamente válida e interesante. Uno de los predicamentos del poeta consiste en hacer comprensible y claro todo lo que rastrea en su interior. El intelectual debe seleccionar en la masa amorfa de las imágenes del subconsciente aquello que mejor favorece su soplo imaginativo.

¿Cuál es mi definición de la poesía? Yo no leo más que por puro placer personal. Y si la encuentro todo lo que puedo decir es : ¡Eso!, y la leo porque me gusta. Lean, entonces, la poesía porque les gusta. Sin preocuparse si es importante o si durará. Después de todo ¿qué importa saber qué es la poesía? Si quieren una definición, aquí va: “La poesía es aquello que me hace reír, o llorar, o arrepentirme, que hace relucir la uñas de mis pies, que me hace esto, o aquello, o nada”, y así es.

La verdadera importancia de la poesía reside en el placer que procura, aun cuando es trágica. Lo que cuenta es el eterno movimiento que existe dentro de ella; la vasta corriente subterránea de dolor, ternura, exaltación, o ignorancia humana que se encuentra hasta en poemas no profundos.

Yo puedo examinar una poesía y ver qué cosa la hace vivir técnicamente. Pero nada tiene eso que ver con el misterio que ha llegado a conmoverme. El mayor creador deja siempre huecos en su trabajo poético, de modo que aquello que no se encuentra en la poesía pueda resplandecer en uno.

El placer y la función de la poesía están hoy, como en el pasado, en la celebración del hombre que es la única celebración de Dios.

miércoles, 4 de junio de 2008

El Perfume, Patrick Süskind y otros comentarios



En medio del Cambalache de libros que comenté en la nota anterior se presentó la oportunidad de capturar el libro El Perfume, el cual estaba en mi lista de necesidades o de pronta lectura, la cual nunca había realizado y apenas la facilitadora del Cambalache lo mencionó se lo despojé de las manos, causando cierta gracia en la mesa... hasta me llamaron Kamikaze!!! jajaja.

Rogelio León contó la trama de la obra de Patrick Süskind, que resultó bien apasionante, tal como fue la misma película que se realizó basada en esa obra.

Uno de los hechos reflejados en El Perfume como en la gran mayoría de la literatura universal es el caracter machista con que los libros han sido elaborados, bajo el criterio de León.

Se conversó sobre las diferencias entre la literatura latina, eslava y anglo. Entre otras obras comentadas se encuentran El Matadero de Esteban Echeverría, Martín Fierro de José Hernández, Raíces que constituyó una obra "que cambió historia". También fue discutida la trama de Intermitencias de la muerte de José Saramago.
Conversamos sobre las Fábulas de La Fontaine, Samaniego, Esopo.

Al final del taller se conversó sobre el movimiento literario colombiano llamado el Nadaismo.

Taller infantil, Relectura, Cambalache

La charla del 29 de mayo de 2008 inició con un comentario sobre el Taller Infantil del ICUM que se encuentra en el edificio de la Biblioteca de Maturín y el mismo cuenta con excelentes instalaciones. Luego subo unas fotos para que lo vean.

También se conversó sobre los Talleres de Lectura que tiene el Instituto de Cultura del Estado Monagas.

El fin de semana pasado, personalmente tuve oportunidad de participar en el Cambalache de libros que organizó Relectura en el Centro Cultural Chacao. Lo comenté por lo bien interesante que fue el mismo. Me fuí con una bolsa de 14 libros que tenía hace años en casa y regresé con otros 14... ahora los comienzo a leer. ¡Qué buena iniciativa de Relectura! Les comento la idea a la gente del ICUM en Maturín por si se animan en algún momento a algo similar.

Les tomo esta foto a la gente de Relectura sobre el Cambalache (disculpen si tienen derechos de autor):

jueves, 29 de mayo de 2008

Recuento del pasado 22 de mayo de 2008

Inició la conversación del pasado 22 de mayo de 2008 recordando que al día siguiente se efectuaría un velorio de Cruz de Mayo en la plaza Miranda, al lado del Complejo Cultural de Maturín.

Uno de los facilitadores del taller nuevamente planteó que los escritos que realizáramos no serían confrontados todavía, esperando realizar confrontaciones directas en un futuro e igualmente mostró la necesidad de equilibrar los ejercicios entre poesía y narrativa.

Hubo una nueva discusión sobre las razones para escribir, señalando el acto de escribir como un ejercicio para "memoriar", metáfora de la memoria ante el terror que puede producir el hecho futuro de no existir. Este pensamiento puede igualmente extenderse a otras ramas del arte, como la música, la pintura, la escultura, donde cada uno de sus productos constituyen parte de la memoria colectiva de la humanidad.

También se conversó sobre una especie de movimiento de los iluminados que se presentó entre los años 20 y 50 del siglo pasado, relacionada incluso con la escuela socio - pedagógica del gestalt. En ese contexto se circunscribe Rómulo Gallegos, quien junto con otros escritores concibió la existencia radical del bien y el mal, sin necesariamente aceptarse la presencia de términos graduales entre ambas posiciones absolutas.

Una de las características de Gallegos es que no se convirtió en un escritor de "naturaleza universal", de acuerdo con Rogelio León, sino que se quedó en el ámbito local... tan local que ninguna de sus obras podría trasladarse a otras latitudes por presentar elementos específicos del ambiente regional para donde escribió, como el llano venezolano, la zona de Guayana, la selva venezolana y otras.

Dentro de Doña Bárbara de Rómulo Gallegos se habló de Mister Danger, tomado por Gallegos como símbolo del mal, bajo la figura idealizada de la corrupción, de la prostitución y quizás de cierto recelo para con el "gringo".

Contrariamente a ese estilo de Gallegos se encuentra Juan Rulfo, donde con su novela Pedro Páramo, se refleja el hombre en el contexto del mundo.

¿Cómo debemos producir el acto de escribir, para hacer una novela universal o como una búsqueda del acto creativo basado en un hecho espontáneo? Buena parte de la discusión versó sobre este tema.

Discutimos también sobre la trascendencia universal de William Shakespeare, incluyendo las diversas dudas sobre la verosimilitud de Shakespeare como creador real de sus obras, claro, sin tomar posición sobre la certeza o la incertidumbre del mismo.

Dentro del criterio de universalidad de ciertas obras, se comentó que nuestro Perez Bonalde escribió el Canto al Niágara, el cual, aunque está relacionado con el Niágara, no constituye una obra precisamente de color local del Canadá, sino una misma obra de gran universalidad.

domingo, 18 de mayo de 2008

El acto de escribir


Luis Segundo Renaud nos aportó el siguiente escrito de Octavio Paz sobre el acto de escribir:


Octavio Paz

He aquí al poeta frente al papel. Es igual que tenga un plan o no, que haya meditado largamente sobre lo que va a escri­bir o que su conciencia esté tan vacía y en blanco como el papel inmaculado que alternativamente lo atrae y lo repele. El acto de escribir entraña, como primer movimiento, un desprenderse del mundo, algo así como arrojarse al vacío. Ya está solo el poeta. Todo lo que era hace un instante su mun­do cotidiano y sus preocupaciones habituales, desaparece. Si el poeta de verdad quiere escribir y no cumplir una vaga cere­monia literaria, su acto lo lleva a separarse del mundo y a ponerlo todo —sin excluirse a él mismo— en entredicho. Pue­den surgir entonces dos posibilidades: todo se evapora y des­vanece, pierde peso, flota y acaba por disolverse; o bien, todo se cierra y se torna agresivamente objeto sin sentido, materia inasible e impenetrable a la luz de la significación. El mundo se abre: es un abismo, un inmenso bostezo; el mundo —la mesa, la pared, el vaso, los rostros recordados— se cierra y se convierte en un muro sin fisuras. En ambos casos, el poe­ta se queda solo, sin mundo en que apoyarse. Es la hora de crear de nuevo el mundo y volver a nombrar con palabras esa amenazante vaciedad exterior: mesa, árbol, labios, astros, nada. Pero las palabras también se han evaporado, también se han fugado. Nos rodea el silencio anterior a la palabra. O la otra cara del silencio: el murmullo insensato e intraducible, “the sound and the fury”, el parloteo, el ruido que no dice nada, que sólo dice: nada. Al quedarse sin mundo, el poeta se ha quedado sin palabras. Quizá, en este instante, retrocede y da marcha atrás: quiere recordar el lenguaje, sacar de su interior todo lo que aprendió, aquellas hermosas palabras con las que, un momento antes, se abría paso en el mundo y que eran como llaves que le abrían todas las puertas. Pero ya no hay atrás, ya no hay interior. El poeta lanzado hacia adelante, tenso y atento, está literalmente fuera de sí. Y como él mis­mo, las palabras están más allá, siempre más allá, deshechas apenas las roza. Lanzado fuera de sí, nunca podrá ser uno con las palabras, uno con el mundo, uno consigo mismo. Siempre es más allá. Las palabras no están en parte alguna, no son algo dado, que nos espera. Hay que crearlas, hay que inventarlas, como cada día nos creamos y creamos al mundo. ¿Cómo in­ventar las palabras? Nada sale de nada. Incluso si el poeta pudiese crear de la nada, ¿qué sentido tendría hablar de "in­ventar un lenguaje"? El lenguaje es, por naturaleza, diálogo. El lenguaje es social y siempre implica, por lo menos, dos: el que habla y el que oye. Así, la palabra que inventa el poeta --esa que, por un instante que es todos los instantes, se había evaporado o se había convertido en objeto impenetrable— es la de todos los días. El poeta no la saca de sí. Tampoco le viene del exterior. No hay exterior ni interior, como no hay un mundo frente a nosotros: desde que somos, somos en el mundo y el mundo es uno de los constituyentes de nuestro ser. Y otro tanto ocurre con las palabras: no están ni den­tro ni fuera, sino que son nosotros mismos, forman parte de nuestro ser. Son nuestro propio ser. Y por ser parte de nos­otros, son ajenas, son de los otros: son una de las formas de nuestra "otredad" constitutiva. Cuando el poeta se siente des­prendido del mundo y todo, hasta el lenguaje mismo, se le fuga y deshace, él mismo se fuga y se aniquila. Y en el se­gundo momento, cuando decide hacerle frente al silencio o al caos ruidoso y ensordecedor, y tartamudea y trata de inven­tar un lenguaje, él mismo es quien se inventa y da el salto mortal y renace y es otro. Para ser él mismo debe ser otro. Y lo mismo sucede con su lenguaje: es suyo por ser de los otros. Para hacerlo de veras suyo, recurre a la imagen, al ad­jetivo, al ritmo, es decir, a todo aquello que lo hace distinto. Así, sus palabras son suyas y no lo son. El poeta no escucha una voz extraña, su voz y su palabra son las extrañas: son las palabras y las voces del mundo, a las que él da nuevo sentido. Y no sólo sus palabras y su voz son extrañas; él mismo, su ser entero, es algo sin cesar ajeno, algo que siempre está siendo otro. La palabra poética es revelación de nuestra condición original porque por ella el hombre efectivamente se nombra otro, y así él es, al mismo tiempo, éste y aquél, él mismo y el otro.

sábado, 17 de mayo de 2008

ICUM bautiza nuevo libro de Beltrán Trujillo Centeno



El Taller de Poesía y Narrativa del ICUM el pasado 15 de mayo de 2008 se fusionó con la celebración del bautizo del nuevo libro de Beltrán Trujillo Centeno, tal como es indicado en el siguiente link del Instituto de la Cultura del Estado Monagas:



Reunión del 8 de mayo de 2008

El pasado 8 de mayo de 2008 vimos sustancialmente reducida la plantilla de asistentes al taller de poesía y narrativa del Instituto de la Cultura del Estado Monagas, mas no por eso dejó de ser sumamente sustancioso su contenido, sobre todo por la oportunidad que tuvimos de leer nosotros mismos en público nuestros escritos y confrontarlos por primera vez entre todos.

La mesa de reunión estuvo conformada por:

Rogelio expresó varias ideas antes de realizar las lecturas de los escritos, entre ellas el hecho que "...el escribir no debe ser un hecho fortuito...". Habló de Funes el Memorioso de Jorge Luis Borges, de que la escritura es una metáfora de la memorialidad, cual fotografía como la realidad. Sobre José Saramago conversó del libreo "La Intermitencia de la Muerte". También habló del concepto de intrahistoria, introducido por Unamuno. Comentó que la llamada literatura infantil o pretendida para niños no existe como tal básicamente porque nosotros como adultos no tenemos el lenguaje infantil, precisamente por no serlo. Habló de Esteban Echeverría, de Rafael Cadenas con sus Micropoemas y de Nicolás Guillén con Songorocozongo.

Para la próxima semana Alcides propuso que cada uno escribiera inducido por la imagen de una pintura específica de Botero... ya veremos qué pasa.

El siguiente jueves, 15 de mayo de 2008, el taller coincidió con el bautizo del libro de Beltrán Trujillo Centeno, por lo que el Taller de Poesía y Narrativa se incorporó a esta actividad.

Hasta una próxima oportunidad.

lunes, 5 de mayo de 2008

Nos llegó esta invitación

Nos llegó esta invitación para la presentación de nuevo libro de Beltrán Trujillo Centeno, escritor de Santa Bárbara de Maturín

jueves, 1 de mayo de 2008

Correo de Luis Segundo Renaud

El pasado 29 de abril, Luis Segundo Renaud nos envió un escrito denominado "Notas de Sandor Marai"... Me interesó saber quién fue tal personaje. En un enlace a la derecha se encuentra un resumen de este novelista húngaro.

En el siguiente link aparece: NOTAS DE SANDOR MARAI

http://cid-4b6e7a9cf00ac111.skydrive.live.com/self.aspx/P%c3%bablico/Notas%20de%20Sandor%20Marai.pdf

¿Qué hicimos el 24 de abril de 2008?

Como primera actividad el día 24 de abril de 2008 leiamos cada uno de los escritos que realizamos en la conversa de la semana anterior, apaciguando las expectativas que quedaron algo en el aire cuando muchos pensamos que leeríamos inmediatamente lo que acabábamos de escribir.

Rogelio planteó leer los escritos sin confrontar, sin profundizar, sin analizar contenidos ni nada que en este primer ejercicio pudiera afectar de alguna manera a gente que por primera vez agarraba un lápiz y en público se atreviera a manifestar. Particularmente procuré escuchar con suma atención y percibir con mis limitaciones las diferentes formas de expresar de los compañeros y les confieso que me sorprendí, pues no conseguí algo que me pareciera que desentonara en los relatos. Claro, esto es solo apreciación personal, veremos qué sucede más adelante.

Otra actividad pendiente de realizar fue el comentario de alguna obra literaria que hubiésemos leído en alguna oportunidad. Luego de varias indagaciones entre todos, se escogió conversar sobre la Odisea, mencionada como una "oralitura", obra colectiva, tal como fue El Cid.

Se habló de la presencia del héroe y del anti-héroe.

Rogelio León recomendó la obra Yo, El Supremo, de Augusto Roa Bastos, ambientada en el Paraguay del último cuarto del siglo XIX.

Tuve oportunidad de expresar la idea del presente blog a todos los compañeros asistentes, aunque a algunos les pareció interesante, a otros les pareció que no querían exponer sus escritos ante la web. Les mencioné que podía diseñar el blog de tal forma que solo el grupo pudiera leerla... pero no se, me quedó en la boca un sabor de algo así como que "...mejor no te metas por aqui..." jejeje, pero bueno, esto es solo un primer intento. Por los momentos iré colocando mis inquietudes sobre el no taller, que ¡bien interesante está!
Para la próxima semana nos solicitaron que lleváramos un escrito que refleje una imagen...

viernes, 18 de abril de 2008

Comentarios sobre charla del 17 de abril de 2008

La conversa de hoy en el Taller de Poesía y Narrativa tuvo tres eventos bien diferenciados.

En una primera parte todos los participantes realizamos un ejercicio de narrativa partiendo de una expresión de arranque, estimándose que los mismos serían leídos en público la próxima semana y probablemente publicados en este blog. Ya veremos lo que pasa con esta primera gestión con lapiz y papel en mano.

En la segunda parte, el escritor Luis Segundo Renaud conversó sobre la escritora María Luisa Lázaro, cuya parte de su vida transcurrió en la ciudad de Maturín. Se acordó que próximamente leeríamos una de sus novelas para su discusión en público.

La tercera y última parte no menos interesante correspondió a una confrontación sobre la orientación del taller. Rogelio León indicó estar de acuerdo con el ejercicio discutido en la primera parte, sin embargo es pertinente planificar la lectura de obras específicas para que sean discutidas en el taller, bueno, en el no taller. Otros participantes, quienes ya habían estado en otros eventos relacionados resaltaron la necesidad de que el ejercicio realizado sea leído y discutido lo más pronto posible, indicando que esperar una semana puede ser mucho tiempo y enfatizó igualmente la necesidad de leer obras específicas que sean discutidas posteriormente. Mucho énfasis hubo en la necesidad de "leer para escribir", leer para crear y confrontar. Se acordó que para la próxima semana se traerán a la mesa discusiones específicas de obras para ser analizadas entre todos.

jueves, 17 de abril de 2008

Participantes del Taller de Poesía y Narrativa

A continuación se indican los participantes del Taller de Poesía y Narrativa, enmarcado dentro del Programa de Formación y Capacitación Artística ICUM de la ciudad de Maturín, Estado Monagas, Venezuela.

sábado, 12 de abril de 2008

Cosmópolis

A continuación transcribo hoja entregada por Victor Rojas para ser leído por los participantes del taller, estimando que será tratado en próxima reunión del taller.


El primer número de Cosmópolis apareció el 1 de mayo de 1894. La vida de esta revista, que se prolongó hasta julio de 1895, se resume en un total de doce entregas, lo cual indica un período de publicación bastante corto. Sin embargo, la influencia que ejerció en su época fue considerable porque en ella se concretizaron tendencias fundamentales del momento. Sus redactores -Pedro Emilio Coll, Pedro Cesar Dominici y Luis Urbaneja Achelpohl- establecieron un diálogo, o charloteo bastante polémico y animado que sirve como presentación editorial de la misma.

Es importante anotar que esta conversación sostenida por estos tres escritores, permite ver claramente el espíritu de confrontación literaria que en ese entonces caracterizaba a nuestro país. Así, observamos dos tendencias, convergentes en ese instante, que darán lugar a incansables discusiones entre muchos intelectuales. Estas dos posiciones o tendencias eran, en primer lugar, el convencimiento de que la literatura debía ser profundamente nacional, como un fiel reflejo de nuestra idiosincrasia y de nuestra realidad histórica y social, y en segundo término, la aspiración a la universalidad, es decir al cosmopolitismo. Pese a que Coll, Urbaneja y Dominici logran coincidir en muchos aspectos de este diálogo, los tres, en realidad, tomarán caminos diferentes y opuestos. Urbaneja Achelpohl será el más enconado defensor de la narrativa regionalista; Dominici hará una literatura, como han dicho críticos, preciosista, de corte europeizante, y Coll definirá su trabajo con una obra muy notable, demostrando ser uno de los escriores más talentosos de la historia literaria en Venezuela.

Fuente: Manifiestos literarios venezolanos
Juan Carlos Santaella

"El Cuervo" de Edgar Allan Poe


Discutiendo la diferencia o semanza entre narrativa y poesía, personalmente mencioné que algunas veces al leer un poema traducido de otro idioma se pierde totalmente la belleza poética del original. Rogelio León inmediatamente recordó a los traductores como traidores con la frase "traductores - traidores".


Producto de esta discusión, un punto aparte fue resaltar la obra "El Cuervo" de Edgar Allan Poe, escrito originalmente en inglés. León indicó que la mejor traducción al español de esa obra la realizó nuestro Antonio Perez Bonalde, quien por situaciones de la vida sufrió de diferentes penas, similares a las de Allan Poe, hasta su misma muerte.

Narrativa versus poesía

Una de las inquietudes de este taller no taller, corresponde a la diferencia entre narrativa y poesía, concluyendo luego de un razonamiento, que la separación entre ambas es difusa, superpuesta, casi inexistente.
Se expusieron múltiples razonamientos donde poemas enteros corresponden a narraciones contundentes, como el Poema del Mio Cid y otros, así como escritos en prosa con una realidad poética sumamente expresiva.
También se habló de los tres grandes ejes temáticos del acto creativo como son el amor, el viaje y la muerte.

¿Para qué escribo?

Al llegar al taller, Rogelio León nos invadió con la pregunta ¿para qué el escritor escribe? Muchos fuimos explicando desde la superficialidad del escribir hasta la profundidad del yo interno que se alivia con el hecho de escribir, concluyendo Rogelio en que "se escribe para no ser botado a la basura" o en otras palabras, el escritor escribe para que le lean.
Dio el ejemplo del caso de Gabriel García Marquez, quien apenas anuncia que va a escribir algo, en todo el planeta se mueven las casas editoras para cuadrar el lanzamiento mundial, entendiendo que es un hecho económico el caso del Gabo, mas no desacredita en absoluto la calidad de su escritura, confirmando efectivamente que también escribe para que le lean.
En todo caso, el escritor escribe en búsqueda de la aceptación del lector.
También se habló del terrible drama de la página en blanco que enfrenta el escritor cuando se dispone a escribir.

Agenda de la segunda reunión

El jueves 10 de abril nos reunimos nuevamente en el Salón Andrés Bello de la Biblioteca de Maturín y conversamos sobre:
  • ¿para qué escribo?
  • narrativa versus poesía
  • traductores traidores
  • "El Cuervo" de Edgar Allan Poe y Juan Antonio Perez Bonalde
  • París como anterior centro de creación del mundo versus el mundo global actual
  • Horario segundo round

Al final de la reunión Victor Rojas nos entregó una hoja con algo escrito, "Cosmópolis" y pronto hablaremos de eso.

Primera reunión

En esta primera reunión conversamos sobre:
  • los miembros del panel del taller
  • la presentación de los participantes
  • el horario
  • confrontar y compartir

Miembros del panel

Se presentaron uno a uno Miguel Mendoza, directivo del ICUM, Luis Segundo, facilitador, escritor, Victor Rojas, también del ICUM y el escritor Rogelio León. Disculpen que no los conozca bien, pero entiendan, primer día.

Presentación de los participantes

Uno a uno nos fuimos presentando quienes manifestamos interés en participar en el taller. No incluyo acá la lista completa porque la calidad del sonido del Salón Andrés Bello de la Biblioteca de Maturín, impide escuchar con claridad a cada uno de los participantes, pero somos como 18 personas. Cuando tenga la lista oficial, la colocaré en un archivo.

Horario

Con el horario tuvimos un primer round, amistoso claro. Lo llamo así porque esta nota la estoy escribiendo luego del segundo encuentro, donde discutimos el segundo round del horario. No importa. En principio estaremos los jueves de 6 de la tarde a 8 de la noche, por lo menos en este round.

Confrontar y compartir

En este primer encuentro se mostró algo del objetivo del taller y de los lineamientos generales del mismo, centrándose en la necesidad de confrontar ideas relacionadas con la narrativa y la poesía y compartir las mismas con la intención de profundizar, mejorar y aceptar críticas, sin ánimo alguno de "destrozar" lo que alguien escribe. Asusta algo. Veremos qué pasa.

Para la próxima semana... lápiz, papel y ganas de trabajar.

Parto del taller que todavía no se qué es

Aclaro, el parto no es este. El parto es de los organizadores del Taller, la gente del Instituto de la Cultura del Estado Monagas, a quienes particularmente no conozco hasta este primer día, 3 de abril de 2008, aunque la nota la escriba varios días después.

Pero bueno, aquí estamos, asistiendo al inicio. Vamos a ver qué pasa.